El Circuit de Barcelona-Catalunya es una pista de carreras de clase mundial nacida en 1991 para albergar el Gran Premio de España de la Fórmula 1 en Montmeló, un suburbio de Barcelona, España. El clima templado mediterráneo de la Ciudad Condal permite que haya carreras durante todo el año, con una temperatura que ronda los 15 °C (59° Farenheit), veranos calientes e inviernos suaves. Éste hecho, combinado con el influjo masivo de turistas en la región, hace que el Circuit de Barcelona-Catalunya sea la sede regular de otros eventos de deportes a motor de alto perfil tales como la Serie Le Mans Europea, la MotoGP, o el campeonato mundial de FIM Superbike, por nombrar unos pocos.
La longitud total de la pista de Barcelona-Catalunya es de 4,67 km (2.9 mi), que consisten en una recta frontal de 1 km (0.62 millas) en el lado sureste de la pista y 16 curvas de ángulos variados en el lado noroeste. La línea de partida y llegada queda en el medio de la recta principal. La primera curva se llama ELF y es una curva a mano derecha de 90° seguida por una combinación de curvas prolongadas a la izquierda y derecha. En la curva número cuatro, Repsol, los pilotos maniobran fuertemente hacia la derecha y después de una recta corta, toman otra curva desafiante en la dirección opuesta. Las curvas seis a la nueve son prolongadas y rápidas, con el segundo segmento más rápido de la pista justo después de ellas, entre las curvas nueve y 10, conocida como La Caixa. Las seis curvas restantes incluyen una chicana y disminuyen la velocidad mientras los pilotos se enfocan en maniobrar correctamente para evitar golpear los laterales de la pista.